Gratis nada, sin recompensa nada

«GRATIS NADA. SIN RECOMPENSA NADA»

Pedro Fraile

Me gusta la gente que habla con claridad.
Sin medias tintas:
«Nadie es generoso a cambio de nada»
«Nadie se juega el tipo por nadie».
¡Eso sí que es ser sincero!

Me fastidian los que van de «religiosos»,
los que presumen de ser buenos,
y luego se arrastran por una recompensa.
¡Parecen desinteresados, pero tienen un precio!

Quizás Señor Jesús, quienes esto dicen, tienes sus razones.
¡El corazón humano es tan débil y pobre!
¡Queremos ser generosos y somos como todos!
¡La vista se nos nubla por un puñado de monedas!

¡Nos gusta, al menos, que nos halaguen,
que nos aplaudan, que nos den honores!

Leo y releo tu evangelio.
Miro con cuidado, a ver si falta algo,
si pones algún pero, alguna precisión.

No. Leo y releo y quiero entender:
«El Hijo del hombre ha venido a servir».
¡Tú has venido a servir!
¡El Hijo del hombre ha venido a dar su vida en rescate por muchos!
¡Tú has dado tu vida por quienes no conocías!

¡Hazme dócil y obediente a tu evangelio, Señor!

Pedro Fraile